BIRMANIA ES MYANMAR

Templo Ananda en Bagan

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Quizás resulte sorprendente que la mayoría de las personas a las que comenté mi futuro viaje a Myanmar, o a mi vuelta de un magnífico viaje de familiarización con el país, me mirasen asombradas o admitiesen sin pudor que desconocían la existencia de Myanmar. 

Quizás no tan sorprendente y justificable ya que hasta 1989 Myanmar era conocido como “Birmania”, protagonista de grandes hechos históricos que lo hicieron famoso bajo el nombre de Burma.

Para entender Myanmar hay que ubicarlo históricamente, geográficamente, política y económicamente.

Si comentas que Birmania fue protagonista y escenario de la película “El puente sobre el río Kwai”, los más avanzados en edad se sonríen recordando tan mítica película. Ficción de tabloide, historia real. Durante la II Guerra Mundial las tropas militares japonesas obligaron a un grupo de prisioneros ingleses a construir un puente de madera, 

el “Ferrocarril de Birmania” o “Ferrocarril de la Muerte” que uniría Bangkok con Rangún, con el fin de reforzar suministros y tropas para la invasión de Birmania por parte de las fuerzas japonesas. Acontecimiento que acabaría con Birmania a manos de los británicos. 


El ingeniero y marino, destacado diplomático Lord Mountbatten, Vizconde de Birmania y desde 1947 elevado a Conde de Birmania, al mando de las tropas aliadas en el Sudeste Asiático contribuyó a la expulsión de los japoneses de Birmania.  Este hecho sin embargo no erradicó hasta 1970 la costumbre de conducir por la izquierda, fecha en que el general Ne Win, tras consultar con un astrólogo cómo cambiar el rumbo del país que viraba demasiado hacia la izquierda, le aconsejó cambiar el sentido de la circulación a la derecha. A día de hoy esto provoca una de las grandes contradicciones del país ya que los coches, mayoritariamente de origen japonés, tienen el volante a la derecha, lo que explica el gran caos “ordenado” circulatorio del país. Pero esto forma parte de uno de los encantos y diversidad de esta tierra llena de contrastes. 

Entre los que participamos de forma activa en la famosa e internacionalmente conocida “movida madrileña”, descubrimos Birmania gracias al desenfadado grupo de música pop “Objetivo Birmania” que tomó su nombre de su homóloga película estadounidense de 1945 protagonizada por Errol Flynn que narra la historia real de la lucha entre tropas americanas y japonesas.   

¿Nos sorprende que Myanmar sea el gran desconocido del Sudeste Asiático?

Situado entre India, China y Tailandia, hasta hace poco Myanmar estaba totalmente cerrado al turismo y a la globalización, debido a una situación política contraria a la apertura al exterior abocando a su economía al aislamiento y a la excesiva dependencia de la agricultura para consumo interno.

Tras años de política convulsa en manos de un gobierno militar autoritario y cerrado, las elecciones del 2015 dieron la victoria al gobierno de Aung San Suu Kyi, Premio Nobel de la Paz en 1991. Actualmente Myanmar mira al futuro con un prisma aperturista, optimista, consciente de que el desarrollo y evolución del país pasa por abrir sus fronteras tanto a la industria como al turismo. Razón y motivos no le faltan ya que Myanmar tiene mucho que ofrecer, cultural, turística y humanamente. 

Con 135 minorías étnicas que viven juntas, prima la diversidad en las personas, en la cultura y en la religión con un entendimiento y convivencia envidiables. Pese a la diferencia de filosofía o religión, les mueve la fe. El 90% de la población de Myanmar practica el budismo theravada de origen indio, cuyo objetivo es la liberación del sufrimiento para alcanzar el nirvana.

Las mujeres de Myanmar han tenido un papel importante en el desarrollo del país y su apertura al exterior. Hoy en día existen mujeres emprendedoras, hoteleras, directoras de grandes almacenes, dueñas de restaurantes, negocios comerciales, docentes, atletas y políticas.

La autora con el equipo de Myanmar Tourism Marketing Association

 

Nuria Alberti con Pearl Phyu – Joint Secretary Myanmar Tourism Marketing Association

Myanmar es rico en cultura, historia, y estructura geográfica diversa. Gracias a sus montañas, costas marítimas, lagos e islas vírgenes ofrece un abanico turístico ideal para ser disfrutado por toda clase de público: infinidad de monumentos milenarios; museos; folclore; artesanía; parques naturales y festivales. 

 El país con más estupas del mundo, apuesta fuerte por el turismo, entendiendo que éste no sólo es una gran fuente de ingresos sino un contribuyente a la paz y al entendimiento de los pueblos. En una iniciativa más por abrirse al turismo y facilitar la entrada al país, desde el 1 de octubre de 2019 los turistas de seis países (Australia, Alemania, Italia, Rusia, España y Suiza) pueden entrar al país obteniendo el visado a la llegada en los aeropuertos internacionales de Yangón, Mandalay y Nay Pyi. 

Pagodas de Indein

El Ministro de Hoteles y Turismo de Myanmar, H.E. U Ohn Maung, en el discurso de despedida a los participantes al Fam Trip Myanmar 2019, confirmó: «Seamos sinceros, la industria del turismo es una industria en auge en todo el mundo y nos lo perderíamos si no hiciéramos todo lo posible para asegurar el lugar de Myanmar en el ámbito internacional. Hemos hecho mucho en los últimos 3 años y seguimos comprometidos para crear una experiencia memorable para nuestros visitantes, un medio de vida adecuado para nuestra gente y una oportunidad de inversión para el mundo «.

Una experiencia memorable para el turista sin duda.  Myanmar no sólo encanta por sus innumerables pagodas, templos, estupas, ríos y lagos. Myanmar es su gente, de carácter afable y amable por excelencia; es el pueblo de la sonrisa verdadera, la que sale del alma, la que transmite realmente y sin tapujos el sentimiento de ser bienvenido al país, la que se contagia

Birmania es Myanmar.  Myanmar es “¡Mingalabar!” ¡Bienvenido a Myanmar! Te sorprenderá.

ENTRE MAR Y MONTAÑA, «RIBAMONTÁN AL MAR»; CANTABRIA INFINITA

“El capitán de un barco no puede desembarcar hasta que la tripulación está a salvo. Aún queda mucha travesía y tenemos mucho que aprender de ti. El cielo puede esperar”. (Ribamontán al Mar, agosto 2019, de J.M. Arrojo al Patrón).

Curiosamente empecé este artículo en Portugal, en la Costa da Caparica, cuando me sugirieron escribir sobre mi viaje a Lisboa. 

Las imponentes playas de Costa da Caparica, al sur de Lisboa, me inspiraron las siguientes reflexiones. Playas kilométricas, vírgenes, de aguas bravas, como las de Cantabria infinita… Mirando al horizonte del mar Atlántico, me percaté de que al panorama que se ofrecía ante mis ojos le faltaban barcos, velas y pescadores. 

En las aguas de la costa portuguesa, cuna de renombrados navegantes como Vasco de Gama, no se avistaba ni una sola embarcación, ni un intrépido marinero osando sortear las olas apoyadas en el viento atlántico.   Cerré los ojos por un instante y me transporté a Ribamontán al Mar, donde cada verano la pandilla espera al Patrón.

Seguramente pocos visitantes de la playa de Somo, paraíso de surferos, sepan que pertenece al municipio de Ribamontán al Mar. Carriazo, Castanedo, Galizano, Langre, Loredo, Somo y Suesa, son enclave y escondite de veraneantes deseosos de preservar su privacidad. Nada hace presagiar que los pueblos y las playas de Ribamontán al Mar abrigan lo más granado de la sociedad española, aquella que no se prodiga en fiestas pomposas ni “photocalls” horteras de programa televisivo veraniego. 

Casas de arquitectura típica cántabra de piedra, donde florecen las hortensias, se erigen con sus verdísimos jardines; color testimonio del clima lluvioso y húmedo que caracteriza esta zona del norte. 

Clima frío y lluvioso, ¿Un mito? Los veranos que he tenido el privilegio de disfrutar en este enclave cántabro han venido marcados por un tiempo soleado, de días en los que las mareas han dictado el rumbo de largas horas de mar, luz y playa

Tablón de anuncios de EL PUNTAL para los que se acercan en sus propias barcas. Hay también un servicio público Santander-El Puntal.

En Carriazo, pedanía y capital del municipio de Ribamontán al Mar, no puedo levantarme sin abrir la ventana y observar que las vacas ya están campando a sus anchas por los prados. La habitación se impregna de olor a naturaleza, a animales, a tierra y a mar. En Carriazo, la pandilla espera la llegada del Patrón, conscientes de que con él la travesía en barco está asegurada. Patrón, que a sus 82 años acaba de renovar su título precisamente en aguas cántabras, aguas a menudo peligrosas, rara vez mansas. 

El Patrón, nacido en Madrid, lleva el mar en la sangre. No en vano adquirió en un anticuario de Inglaterra una placa que reza “I am the capitan of this ship and I have my wife´s permission to say so” que luce orgullosa junto a brújulas y escuadras marinas en el salón de su casa. Esos pequeños detalles que recuerdan constantemente al mar. 

Antes de partir hacia una nueva travesía en barco nos desperezamos con una larga caminata por los pastos que recorren la distancia entre Carriazo y Galizano. En este último pueblo, presidido por la maravillosa iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, hacemos un alto en el camino para comprar los sabrosos sobaos El Macho. ¡No hay quien se resista! Aprovecho la quietud de la mañana y del paisaje para hacer unos ejercicios de yoga; en lugar de saludos al sol saludo a las vacas que parecen encantadas con tan original visita. 

Los Sobaos El Macho, para un gustoso desayuno

A media mañana nos aprestamos a partir, ilusionados, hacia un nuevo día de mar. La embarcación está atracada en las boyas de pescadores de Somo, y vamos a navegar hasta El Puntal, la cara extrema de la playa.

Embarcar ya es toda una aventura. El primero en hacerlo es el Patrón que acerca el barco hasta la escollera para que al resto de los tripulantes no nos resulte tan incómodo el desafío. Desatracar es un ritual en el que debido a las corrientes marinas, las maniobras de un día no son iguales a las del siguiente; es imprescindible bichero a mano para distanciarnos del amarre y emprender el rumbo.

Aunque teóricamente nos separan sólo veinte minutos de navegada hasta El Puntal, la travesía nunca está exenta de escollos: la Pedreñera (embarcación que recorre el tramo de Somo a Santander), los bañistas despistados, los paddle surf, los piragüistas y los bajos arenosos; una vez esquivados y alejados de la pequeña y estrecha vía, nos adentramos de lleno en el canal.

“Se entra en el canal casado y se sale divorciado”, afirma una expresión marinera que nos recuerda rojo con rojo al entrar, rojo con verde al salir. 

 La navegada hay que sentirla, experimentar la sensación de libertad única, el viento en la cara. La inmensidad, el cielo y el mar confunden sus azules fundiéndose en uno. Los caprichosos vientos cambiantes dictarán al Patrón cómo capitanear; barco escorado, surcamos las olas hacia la bahía de Santander que se vislumbra a lo lejos presidida por el Edificio Centro Botín, inaugurado hace dos años, rompedor, moderno, contraste de lo viejo y de lo nuevo, reflejo de una ciudad en continua evolución y ebullición cultural. 

El CENTRO BOTIN, edificio diseñado por Renzo Piano y uno de los vértices de atración
cultural de Santander

El Puntal no tiene pérdida, se avista la inmensa bandera de España que ahonda orgullosa junto al embarcadero y Chiringuito El puntal Tricio, declarado uno de los diez mejores de España y al que únicamente se puede acceder por la playa andando, nadando o en barco.  En los días soleados de verano está tan abarrotado como los más famosos chiringuitos de Baleares… lo que nos recuerda a Illetes en Formentera. El olor a rabas y marisco nos invita a abandonar el barco y saltar por la borda para pedir mesa, momento que aprovechamos para darnos un refrescante baño en el mar. 

Es la hora de unas rabas con vinitos en EL PUNTAL

El Patrón, mi padre, no llamó a su barco “Libertad” como José Luis Perales al barco de su canción “Un velero llamado libertad”; ni se fue tomando sus cosas para batirse en duelo con el mar; a su barco lo llamó Taube, Paloma, en alemán, el nombre de mi madre. Como buenos amantes de la mar, a su primera hija la llamaron, María del Mar. El lobo de mar y la paloma mensajera han surcado un verano más los mares de Cantabria que embellecen Ribamontán al Mar. 

MANSILLA DE LA SIERRA ; RECUPERANDO SU HISTORIA SUMERGIDA

“Estamos en la edad del adosado y el fascículo” decía un amigo allá por los noventa. Como la paloma de Alberti, se equivocaba, los adosados ya habían comenzado en La Rioja rural al principio de la década de los sesenta del pasado siglo.

Por Paloma Ausejo (FIJET ESPAÑA)

Mientras se sumergía un pueblo entero cargado de historia absorbido por las aguas de un supuesto progreso en forma de pantano,  un nuevo Mansilla de la Sierra surgía a sus orillas. Piedras y cemento sin especial carácter, aunque no sin buena intención, acogieron en arquitecturas de viviendas adosadas, alineados en seis calles, plaza e iglesia, a una población que se resistió siempre a perder su alma sepultada bajo las aguas del embalse. 

Sube el embalse y comienza la agonía de la primitiva Mansilla de la Sierra

Más de sesenta años después, avanza con paciencia,  resolución y con pocas ayudas oficiales, una recuperación de materiales y tradiciones que constituyen verdadera memoria histórica reencarnada en un grupo de unos sesenta habitantes dispuestos a resucitar, renovado, un pueblo que hunde sus raíces en la Hispania romana y hoy digno ejemplo de aquellos que se resisten con energía y tesón a ser incluidos  en el catálogo de la España vacía.

Paisaje al oleo de Emilio García Moreda con el tema de Mansilla de la Sierra

Roto en pocos minutos el hielo de muchos año sin aparecer por el pueblo de mi padre nos hace de cicerone José María Menéndez de la Cuesta, un ingeniero que  resiste a las tendencias destructivas del tiempo y que junto con otros vecinos lidera los esfuerzos de recuperación de la historia sumergida de Mansilla. Al escuchar mi pregunta sobre los Matute que puedan quedar en el pueblo empieza a interesarse más vivamente por la presencia de un trio para él desconocido,  una de mis hijas, mi marido y yo, que muestran un cierto conocimiento de antiguos habitantes del lugar e interés por su actual situación.

Después de unos huevos fritos hechos con generosidad y diligencia por el propietario del único bar donde se reúnen, en casi permanente tertulia, las fuerzas vivas de Mansilla, comienzan los recuerdos suavemente excitados por unas copas de excelente vino de Rioja.

Sotero Ausejo, abuelo paterno de la autora

En mi memoria reaparece alegre y entrañable la figura de mi prima Ana María Matute Ausejo, rodeada de niños del pueblo, entre los que me encontraba,  a los que mantenía  en  asombrada atención con aquellos cuentos, creados sobre la marcha y  avanzadilla de lo que luego, con los años, se convertirían en relatos y novelas que la hicieron famosa y la alzaron a la Real Academia Española y al Premio Cervantes y Premio Nacional de las Letras Españolas por el conjunto de su obra literaria.

La autora bajo el recuperado Puente de Suso, puerta e entrada a la nueva Mansilla

Mi prima Conchita, casada con un hombre emprendedor, persona limpia y recia cuyo trabajo  le llevó desde una posición económica notable  a, como consecuencia de la crisis, descargar barcos en los muelles de Barcelona. Recuerdo su casa de Mansilla, la número tres de la fila de edificios  adosados más lejana a la orilla del embalse. Allí sencillamente recogidos reorganizaron su vida, más sencillamente pero no menos feliz. 

Ramón Tamames el economista  catedrático y su hermano médico muy estimado,  frecuentaban Mansilla. Los fundadores y dueños de Casa Matute, famosa tienda de la calle de Barquillo en Madrid que suministraba lámparas, porcelanas de Sajonia y otros complementos para las viviendas de la alta sociedad madrileña, eran hijos de Mansilla de la Sierra.

Uno de los escudos de piedra recuperados de las fachadas de casas nobles de Mansilla

 Entre recuerdos y detalladas explicaciones de lo que el pantano sepultó, José María nos iba enseñando los escudos de nobleza, labrados en piedra, recuperados con esfuerzo de las fachadas de las casas nobles del antiguo Mansilla cuyos restos aparecen, como un fantasmagórico decorado cinematográfico, cuando las sequías periódicas dejan de nuevo en seco lo que queda del antiguo pueblo, cabeza de una confederación de municipios, creada en 1584 y formada por cinco villas pertenecientes a lo que hoy es la Comunidad  Autónoma de la Rioja y otras dos vinculadas a Burgos. Sus representantes , en el XVI, se reunían democráticamente  en la Casa de Islas, hoy irrecuperable, para tratar de los asuntos concernientes a los pueblos  que representaban y cuyas decisiones eran posteriormente refrendadas por la autoridad real.

La autora con su hija Paloma y y José María Menéndez de la Cuesta

El espíritu de esa confederación –con la refundación de una moderna casa que han denominado De las Siete Villas- es lo que poco a poco van recuperando esas fuerzas vivas de Mansilla y de las otras seis villas para que tradiciones, patrimonio histórico y artístico  común e iniciativas en marcha y proyectos de futuro permitan recuperar un espacio renovado y ofrecer a aquellos que lo deseen, la posibilidad de gozar de los bellos paisajes, la amabilidad y la paz  de una de las zonas más bellas de la Rioja rural, la sierra de Cameros y sus pueblos. 

El monasterio benedictino de Valvanera, muy cercano a Mansilla, situado en la línea fronteriza que separaba Castilla de Navarra en el siglo XI, alberga la imagen de la Virgen de Valvanera, talla de estilo románico que muestra en el rostro de la de la madre de Dios una  determinación que sugiere la que anida en el espíritu de los mansillanos. La Hostería del monasterio ofrece un lugar ideal para unos días de descanso, -wifi incluido- una excelente cocina casera y el disfrute de la naturaleza mediante excursiones a parajes bellísimos.

El símbolo del esfuerzo de recuperación histórica de los mansillanos nos lo muestra José María con orgullo y no sin emoción; el Puente de Suso, del siglo XVI. Recuperado piedra a piedra del lecho del pantano y vuelto a construir a la entrada del nuevo pueblo, nos avisa de que allí “el adosado y el fascículo” nunca sustituirán a la historia.

La nueva Mansilla se construyó con casas adosadas alineados en seis calles

SANARY-sur-MER: UNA COSTA AZUL TRANQUILA Y ASEQUIBLE

Saint-Tropez, Cannes,  Saint-Raphael, Niza o Mónaco han propiciado la imagen colectiva de un mundo de lujo y desenfreno para millonarios, pero una Costa Azul tranquila, sosegada y bella  existe…. y es asequible.

Sanary-sur-Mer, incorperada al mar. En su pequeño puerto
las tradicionales «pointu» de vela latina

Aficionada a los mercadillos populares y callejeros me sumerjo en el mar digital y a veces pesco alguno que me parece interesante, si puedo  personalmente lo paseo y alguna ganga cae. En una de esas navegaciones  virtuales realizadas por  tierras  francesas encontré uno  que me llamó la atención porque estaba calificado en 2018 como mejor mercadillo callejero de Francia. Se realizaba todos los miércoles  en un pueblito de la Costa Azul, Sanary-sur-Mer.  Allí con mi familia disfruté unos días de julio después de comprobar, no sin cierto asombro, que no era ruinoso alquilar una casa con piscina y a siete minutos del mar. Un trozo de costa que desde Saintes Maries de la Mer hasta Mónaco separa  del Mediterráneo a una de las más bellas regiones de Francia, La Provenza.

Un vuelo de dos horas escasas al aeropuerto de Marsella y coche de alquiler fue la fórmula elegida para evitarnos el largo camino de Madrid a la frontera francesa. Una hora de coche desde Marignan, debido al intenso tráfico de los alrededores de Marsella, y una cálida acogida por parte de Soledad, encargada por los propietarios, a la sazón navegando a vela por aguas del Atlántico, de introducirnos a las peculiaridades de la casa y del pueblo que desconocíamos. A sus preciosas informaciones Soledad añadió un bote de “tapenade” de aceitunas negras y un vino de la región y una recomendación, que probáramos la “tropézienne”. Todo auguraba  y se confirmó, unas agradables vacaciones.

Sanary-sur-Mer hace honor a su título. Incorporado al mar en una  bahía no muy grande está presidido por una torre medieval y una iglesia, con su interior en estilo bizantino, -atendida  por un joven sacerdote español de nombre Rodrigo-. Sanary rezuma tradiciones marítimas. Las típicas barcas provenzales, de vela latina, llamadas “pointus” ocupan una parte no pequeña del muelle que está adherido al paseo marítimo que en realidad es la calle principal del pueblo. Dedicados en otros tiempos a la pesca actualmente son  treinta y cinco verdaderas reliquias  de la carpintería  de ribera y tienen el título de “Barcos de Interés Patrimonial”.

Mercadillo de Sanari, en 2018 nominado el mejor mercadillo de Francia

El primer miércoles, mercadillo. Como sucede habitualmente en Francia y también en España, la oferta de productos de la tierra para ilustrar una mesa no me defraudó en tanto que responsable de la intendencia familiar. Pero una particularidad no habitual en estas plazas, varios puestos de pescado, a los que había que acudir temprano pera comprar atún o pez espada, que hicieron la delicia de los amantes del pescado recién traído de la mar.

Playas, alguna de las cuales era accesible en un paseo de un cuarto de hora, tienen la belleza de las calas típicas de una costa algo escarpada. La de Six Fours-les-Plages, pueblo unido a Sanary sin solución de continuidad, más extendida y con hamacas y sombrajos, buenos restaurantes, excelente por su suave pendiente para el baño de niños  y mayores sin demasiado interés por la natación deportiva. Enfrente de la playa una vista de conjunto de Sanary y poco más hacia el oeste Bandol, algo más grande que Sanary, al que se puede acceder dando un paseo y que tiene una amplia oferta de restaurantes y un puerto deportivo con aguas más profundas que el de Sanary-sur-Mer. Muy cerca la pequeña isla de Bendor, convertida por Paul Ricard –que la adquirió desierta en los años 50- en centro turístico con hoteles,  iglesia, apartamentos y puerto deportivo. 

Playa de Six-Four-les-Plages. En el horizonte la isla de Embiez

Otra isla cercana,  Embiez, también propiedad de la familia Paul Ricard y muy cercana a Six-Fours-les-Plages, en sus noventa y cinco hectáreas hay una interesante variedad de paisajes, pequeñas calas,  viñas y al estar muy poco construida es ideal para aficionados al senderismo.  A ambas islas se puede acceder desde Sanary en pequeños barcos  con horarios regulares.  En Embiez un trenecillo recorre la isla con paradas en puntos donde poder contemplar la belleza del entorno.  Paul Ricard, enterrado en la isla, fue el creador de un  imperio de bebidas alcohólicas, que comenzó con el famoso “pastis” Pernod, autorizado cuando se produjo la liberación en 1944 después de la prohibición por el gobierno de Vichy. Hoy  posee varias firmas mundiales y entre ellas está la española Larios famosa por su ginebra.

En la isla de Embiez una red de caminos invita a hacer senderismo

Entre los grandes atractivos de esta zona de la Costa Azul francesa está el hecho de que a poco más de una hora de coche y con una buena red de autopistas y carreteras comarcares podemos visitar los puntos más interesantes de la Provenza  como Aix-en-Provence, el parque natural de La Camargue, Saint Remy, refugio de Carolina de Monaco, L’Isle sur la Sorgue, el parque natural de Luberon o ciudades como Marsella y Toulon. 

Atardecer en la costa

Terminamos nuestros días de descanso  con un almuerzo en Saint Tropez y con ganas de acercarnos a Cannes y Niza, un poco más lejanos pero también asequibles en un solo día. 

(Fotos por Paloma Ausejo)

LA PALMA; CUIDADO…. QUE ENAMORA

“El polvo se te mete en el alma”, palabras de mi amigo periodista y palmero de nacimiento y corazón José Juan Pérez Capote al referirse al Carnaval de los Indianos, que se celebra en La Palma cada lunes de Carnaval. Mi curiosidad se desencadena y ¡Al carnaval palmero me voy, donde mejor se puede gozar!

En el Bosque de los Tilos

El origen de la fiesta remonta a mediados del siglo XIX cuando la ciudad entera corría a recibir a los nuevos indianos procedentes de Cuba donde partieron para hacer fortuna y volvieron con dinero y con nuevas formas de vestir, joyas, tabaco, puros y ritmos musicales traídos del Caribe cubano. En 1920 un grupo de amigos e ilustres de La Palma deciden disfrazarse durante los Carnavales parodiando a los Indianos que llegaron de Cuba, dando pie a lo que hoy conocemos como “Carnaval de los Indianos”.

“De la Habana ha venido un barco… De mi ventana huye el barco venido ayer de La Habana. ¡Saltemos del lecho al barco, lucera de la mañana!” cantaba el poeta de la mar, Rafael Alberti, en su obra “Marinero en Tierra.

Ataviados con guayabas, trajes de lino, vestidos de época, joyas, abanicos, sombrillas de encaje, portando maletas de cuero supuestamente repletas de dinero y acompañados de sus sirvientes de origen africano. Los participantes se dirigen a la Plaza de España renombrada Plaza de la Habana para la ocasión. Durante “La Espera”, al son de ritmos caribeños, esperan el recibimiento del Cónsul de Cuba en La Palma. Con la llegada de la Negra Tomasa, Embajadora de la fiesta y representante de los criados negros traídos a La Palma, da comienzo la fiesta que durará hasta la madrugada. 

Una nubareda blanca  empaña la ciudad. El comienzo de la guerra de polvos de talco, forma parte de una de las leyendas de las Islas Canarias, creyéndose que se remonta al siglo XIX cuando un barco dejó en el puerto un cargamento de harina en mal estado que se utilizó como ocasional material de diversión durante el Carnaval que a la sazón se celebraba. Esta idea no llegó a tomar carta de naturaleza en la historia de la isla y actualmente se cree que proviene de una sociedad secreta cubana, el Ñañiguismo,  uno de cuyos rituales consistía en blanquearse la piel. 

La alegría se desata por las calles, una sana fiesta en la que la blancura contrasta con los verdes variadísimos de la isla. No faltan guajiras, guaranchas, guanguancós, habaneras. El ron y los mojitos corren generosamente y la comunicación entre vecinos y visitantes se produce de forma natural. 

El que viene para disfrutar del Carnaval tiene el valor añadido de estar en una isla que conserva su naturaleza salvaje e inusitada. Parques Naturales y parajes vírgenes inundan la isla de apenas 706 Km2 ofreciendo variadísimos paisajes de incomparable belleza. 

Caldera de Taburiente, Las Nieves y Cumbre Vieja; caminar por Los Tilos, entre helechos gigantes, el Cubo de la Galga, una ruta fácil donde observar la laurisilva en todo su esplendor o llegar hasta el Mirador del Roque de los Muchachos, el punto más alto de la isla a 2.426 metros de altura donde se encuentra el Observatorio Astronómico de renombre mundial, son citas casi obligatorias para los amantes de la naturaleza.   Caminante, hay camino, La Palma se hace al andar; no te puedes perder la ruta de los volcanes en Fuencaliente. ¡Buen camino!, respira a pleno pulmón y disfruta, siente el imán de la tierra bajo tus pies y emprende el sendero hacia lo desconocido pero mágico, que te impregna de energía, el sendero es una guía que quizás te lleve hasta el mar. 

Un mar de azul intenso, profundo, un mar inquieto, cuyo ruido constante de las olas que rompen con fuerza contra los acantilados contrasta con silencio y el sosiego de los bosques, ¿aparecerá un duende?.  No sé si me he perdido en la profundidad de los bosques o la inmensidad del mar, ambos me transportan hacia el infinito. Al infinito hacia el que mira el palmero, mirada del que ve la vida pasar, de quien la vive con pasión o con tranquilidad, pero nunca indiferente ante un estado de ánimo placentero, de una vida apacible, al ralentí, sin prisas. Del que la vive intensamente o tranquilamente, pero saboreando cada segundo del día. Del que se levanta con una sonrisa y se acuesta con una sonrisa.

Tecnología, big data, blockchain, marketing; estrategias de fidelización. Hoy en día se puede viajar si salir de casa, pero nada puede sustituir a la experiencia del viaje, al descubrimiento de lo desconocido, a La Palma que fideliza, definitivamente, que enamora. “Mindfulness”, la atención plena, el aquí y ahora; “cittaslow”, el movimiento lento; ¿se inventaron aquí?. ¡Pierde la noción del tiempo y quítate el corsé de los horarios, la prisa no es una premisa en La Palma. No se puede vivir eternamente anclados en el pasado… ¿o sí?Deja que el ruido de las olas del mar meza tus pensamientos y abandónate a los ensueños. La Palma huele a tierra, a aire, a larva dormida, a mar.

De nuevo me permito la licencia de citar a   Rafael Alberti y a  su – “Marinero en Tierra”. “El mar. La mar. El mar. ¡Sólo la mar! Por qué me trajiste, padre, a la ciudad”

La Palma se me metió en el alma. 

MALTA; UN PEQUEÑO GRAN PAÍS ANCLADO EN EL MEDITERRÁNEO

La hospitalidad de los malteses se demostró una vez más acogiendo en su preciosa isla al Sexto Foro de Turismo Mediterráneo.

Nuria Alberti Ausejo

La isla de Malta que hace más de dos mil años acogió a uno de los “turistas” más famoso de la historia del Mediterráneo, ha acogido recientemente el sexto Foro de Turismo del Mediterráneo convocado por la “The Mediterranean Tourism Foundation” (MFT). Una delegación perteneciente a países del Mediterráneo de Fijet Word(Asociación Internacional de Periodistas y Escritores de Turismo) se dio cita en la histórica isla para participar en este cada vez más relevante evento para el sector turístico del área Mediterránea. 

“The Mediterranean Tourism Foundation” es una organización internacional independiente cuyo objetivo es promover la cooperación pública y privada en ese sector, así como potenciar el turismo sostenible en los países del Mediterráneo, colaborando a transformar la región en un área de paz, cooperación y prosperidad a través de la colaboración regional, proyectos e iniciativas comerciales. “The Mediterranean Tourism Foundation”  (MFT) se creó en el año 2013 por iniciativa del MHRA (Malta Hotels and Restaurants Association) y desde entonces se ha convertido en un centro de encuentro regional de carácter y cultura de países del Mediterráneo. 

La Fundación organiza anualmente el Foro de Turismo del Mediterráneo, encuentro que reúne a líderes de la sociedad, representantes del Gobiernos, ejecutivos, líderes internacionales, organizaciones no gubernamentales de turismo con el objetivo común de definir prioridades, dar forma a la cooperación y promover la paz. 

Bajo el lema “Mediterranean Stars” (Sustainable Tourism Actions and Renewal Strategies) se celebró el 15 de febrero el 6 Foro en el Hotel Intercontinental de St. Julian’s, con la participación de más de mil personas pertenecientes a 36 países. 

La noche anterior –haciendo gala de la histórica benevolencia de los malteses-  los asistentes tuvimos el honor de ser recibidos y agasajados con un cóctel de bienvenida en el San Antón Palace por la Presidenta de Malta y Patrona de la Fundación, Dña. Marie-Louise Coleiro Preca.





Desde aquí comparto la contundente reflexión de Marie-Louise Coleiro Preca “Realmente creo que la industria del turismo es un contribuyente influyente para crear y mantener la paz mundial”.

La introducción al Foro corrió a cargo de Andrew Agius Muscat, Secretario General de la Fundación, quien cedió la palabra a Dña. Marie-Louise Coleiro Preca. “Estoy orgullosa de que Malta esté en el corazón de los esfuerzos tan importantes para promover estrategias para el turismo que prioricen la sostenibilidad”, recalcó en relación a la temática del Foro que prosiguió con la participación de auténticas estrellas del mundo empresarial, cultural y social. 

Destacaron los paneles de discusión, entrevistas y conferencias así  como el Maestro Bruno Santori en la Gala Concierto y entrega de premios ofrecida en el Mediterranean Conference Centre en La Valeta. La ceremonia culminó con la entrega del premio “Great Sea Award” a nuestros compañeros de ATURJET(Fijet Turquía), a manos de su Presidente Delal Atamdede, por su contribución a la promoción turística de Turquía, que consiguió dos años consecutivos el premio “Golden Apple” instituido por FIJET Interncional. 

Como no podíamos abandonar Malta sin conocer este pequeño país en dimensiones pero gran país cargado de historia, la Oficina de Turismo de Malta organizó para los miembros de FIJET una excursión a La Valeta y Mdina, en la que tuvimos la oportunidad de conocer más directamente el atractivo de la isla que, con Ibiza, es la única isla del Mediterráneo  que conserva intactas sus murallas de defensa. Pero Malta es más que un atractivo turístico. Visitando la isla pudimos recordar la historia de ese famoso viajero que fue san Pablo que, camino de Roma naufragó el barco que le llevaba salvándose todo el pasaje y tripulación en una playa de Malta. La descripción del viaje escrita por San Juan en los “Hechos de los Apóstoles” es digna de un maestro del lenguaje marinero. Señala el cronista que llegados a la playa, los malteses “nos mostraron singular humanidad; encendieron fuego y nos invitaron a todos a acercarnos a el, pues llovía y hacía frio”. Esperando a otro barco que los llevara a Roma san Pablo curó a enfermos, entre otros al padre de Publio, un principal de la isla que les acogió amistosamente. No se en que momento de la historia se le nombró, pero hoy Malta venera como patrono al “Apóstol de los Gentiles”.



		

ASTURIAS CORAZÓN DE ESPAÑA, EN FITUR 2019

Por tercer año consecutivo Asturias supera los dos millones de visitantes

Mis amigos asturianos suelen bromear con los suyos foráneos  citando el dicho conocido “ Asturias es España y lo demás tierra conquistada a los moros” claro que esta afirmación hecha mientras se saborean unos percebes y unas botellas de sidra de Villaviciosa, no suele resultar nada ofensiva ni hiriente para los contertulios dotados de un mínimo de inteligencia y sentido del humor.

El viernes 25 de enero se celebró el día de Asturias en Fitur 2019 y a esa jornada asistió, pese a los taxistas, el presidente de la Comunidad Javier Fernández que conversó animadamente con todo el quiso acercarse a él. Resulta siempre cercano y familiar lo que es de muy de agradecer. En una breve intervención recordó al desaparecido Vicente Álvarez Areces y ponderó su dedicación al fomento del turismo en su Comunidad que , aseguró, fue característica de su mandato.

El presidente de Asturias D Javier Fernandez en el stand de FITUR 2019

Citó cifras muy significativas: ”Por tercer ejercicio consecutivo Asturias ha vuelto a superar los dos millones de visitantes y los cinco millones de pernoctaciones. Por lo  que se refiere al mercado internacional,  que afirmó ser una de nuestras prioridades, el crecimiento ha sido el pasado año, del 6,7% contando solo hasta noviembre. Todo ello hace que el turismo aporte al Valor Añadido Bruto algo más del 10% y al empleo el 11%.”.

Si mis lectores han prestado un poco de atención al himno de esa tierra se habrán dado cuenta de lo inocente que resulta, ni reivindicaciones ni críticas .

“Asturias patria querida Asturias de mis amores quien estuviera en Asturias en todas las ocasiones”.

Se ve que eso lo escribe un asturiano ausente que echa de menos la sidra y los centollos, no me extraña nada.

“ Tengo de subir al árbol tengo de coger la flor y dársela a mi morena que la ponga en el balcón” .

Si hay que subir al árbol para coger la flor se ve que no es de suelo ni de arbusto ni de nada que florezca al alcance de la mano. 

Ese párrafo plantea varios temas dignos de comentar:

.- La decisión del asturiano de afrontar las dificultades. Está dispuesto a subir al árbol, no dice por ejemplo “buscaré una escalera para subir al árbol a coger la flor” esta opción es poco épica para un himno, me parece a mi, o bien “hombre ¿no habrá alguna flor a ras del suelo o por lo menos al alcance de la mano sin tener que trepar al árbol?”. Cierto que no nos consta la altura del árbol pero siempre existe el riesgo de darse una costalada, sobre todo si hay que soltar una mano para coger la flor.

.- La morena se ve que tiene fijación con alguna flor de árbol, ni rosas , ni claveles, ni nardos ni nada normal. ¿ Será flor de un frutal? No sería extraño que se tratara de la flor del manzano precursora de la sidra. Sea como sea hay que reconocer lo singular de la predilección. Anda que no hay flores al alcance de la mano por toda Asturias. ¡¡¡ Pues nada, que a la morena le gusta la del árbol !!!

Pero es cierto que al asturiano ya se le están hinchando un poco las narices porque a continuación dice : “ Que la ponga en el balcón que la deje de poner tengo de subir al árbol y la flor he de coger”

La ciudad vista desde uno de los muelles del Puerto Deportivo de Gijón (Foto A.Alberti)

El espíritu deportivo o el gusto por el riesgo es lo decisivo, se ve que es superior al deseo de complacer a la moza, algo así como si viniera a decir:

“ Que haga lo que le de la gana con la dichosa flor pero voy a subir al árbol y se la bajo ¡¡¡por estas!!!” .

En todo el himno no aparece ni una palabra contra nadie, ni un rastro de amargura, ni palabras altisonantes, ni deseos de dominar nada. 

Vengan ustedes a Asturias, no voy a ponderar ni los monumentos ni la gastronomía, ni el paisaje, ni las playas, ya lo hacen otros mucho mejor que yo, pero créanme, todo junto incluido el nativo, dan un resultado que a mi me parece absolutamente confortable, vale la pena pasar unos días en este Paraíso Natural .

José Antonio Busto

DIYARBAKIR, LA LUZ DE TURQUÍA

Mi nombre en árabe, Nura, significa “luz”. En el día Mundial del Turismo viajo a Diyarbakir, “el París del Este”, como sus propios habitantes la denominan, aunque bien la podríamos describir como la ciudad turca de la Luz y apodarla “Nura”.

En la Anatolia turca, a apenas dos horas de vuelo de Estambul, a orillas del río Tigris, se erige esta imponente ciudad cargada de Historia e iluminada por una potente luz que asoma en todo su esplendor ya desde el amanecer.

Patrimonio de la Humanidad desde 2015, la Unesco reconoció el valor cultural y patrimonial de la ciudad, en su conjunto “Paisaje cultural de la fortaleza de Diyarbakır y jardines del Hevsel”. Diyarbakir, ciudad fortificada, consta con la segunda muralla más importante del mundo, por detrás de la muralla China. Construida durante el reinado de Constantino con el fin de protegerla de las invasiones, sus casi seis kilómetros de muralla de basalto negro, 82 torres de vigilancia y cuatro puertas de entrada, se muestra hoy prácticamente intacta.

Ciudad que en el limes romano llevó el nombre de Amida y que romanos, persas, bizantinos, árabes, turcomanos se la disputaron a lo largo de su agitada historia. Leer la descripción que hace Stephen Dando-Collins en su obra titulada “Las Legiones de Roma”, de la toma de Amida por los persas, es una buena introducción a los dramas históricos desarrollados en ese teatro vivo ahora denominado Diyarbakir.

Iniciamos la visita del centro histórico de Diyarbakir y sus monumentos religiosos a pie, adentrándonos en sus murallas, para pasear por sus calles estrechas, bulliciosas, llenas de vida. Hacemos una alto en  los caravanserrallos de Hasan Pasa Hani, hoy convertido en centro de  parada obligatoria para  tomar un té antes de visitar la Gran Mezquita, la Unlu Camessi, la más importante de las veintidós que existen en la ciudad y la más antigua de Anatolia, construida inicialmente como catedral cristiana  llamada “Santo Tomás”. Proseguimos el recorrido visitando La Mezquita de Beharampasa, construida por el Gobernador de Diyarbarkir en 1572.re

Alentada por seguir la costumbre, paso siete veces bajo las cuatro columnas del Minarete de los cuatro pies, lo que me garantiza buena suerte según una antigua tradición.

Fruto de la herencia y coexistencia de religiones que han dejado huella en edificaciones sagradas, las Iglesias también merecen una visita. La Iglesia Armenia de Santo Giragos, voz apagada que nos habla de limpiezas étnicas que, en su día, redujeron drásticamente las poblaciones cristianas de origen kurdo y armenio; o la Iglesia Ortodoxa Siriaca de Nuestra Señora que fue construida como templo pagano en el siglo I d.C. La construcción actual data del siglo III y ha sido restaurada en múltiples ocasiones.

Iniciamos el recorrido turístico a los monumentos civiles, comenzando por la visita a la mansión de Cemil Pasha, ejemplo de arquitectura tradicional con decoración de piedra caliza blanca y basalto negro, convertida hoy en Museo, forma parte de un proyecto liderado por la municipalidad, empresas públicas y privadas, de reconversión y restauración de edificios antiguos, con el fin de relanzar el comercio, la cultura y el turismo de la ciudad.

Diyarbakir es una ciudad de contrastes. Murallas adentro, mujeres vestidas con el traje tradicional nos saludan desde las puertas de sus casas con una sonrisa abierta y cálida mientras que los hombres cantan melancólicas melodías reflejo de historias pasadas.

Alrededor del centro histórico se ha desarrollado una ciudad moderna, de grandes y largas  avenidas repletas de centros de ocio, restaurantes, discotecas, bares, hoteles de cadenas internacionales, edificaciones de viviendas futuristas que acogen según la tradición a esposos, suegras, consuegras, hijos y hermanos.

Si me impresionó la belleza del centro histórico de Diyarbakir y el contraste con el desarrollo moderno de la ciudad, no menos impactante me resultó la visita al emplazamiento neolítico de Cayönu, de casi diez mil años de antigüedad cuyos restos de excavaciones permanecen en el Muso de Diyarbakir.

No en vano el esfuerzo de la Municipalidad de Diyarbakir por devolverle el esplendor y hacer de la ciudad un referente de destino turístico, fue premiado por la Federación Internacional de Periodistas y Escritores de Turistmo, Fijet, con su galardón “Pomme d’Or”, el premio Oscar de Fijet, en una ceremonia celebrada el 30 de septiembre en el Hotel Radisson de Diyarbakir. El Presidente de la Federación , D. Tjani Haddad,  remitió al gobernador de la ciudad, D. Hasan Basri Guzeloglu la Pomme d’Or en presencia de los responsables locales y regionales.

  1. Tijani Haddad alabó los proyectos realizados para promover el desarrollo de la ciudad y la promoción del sector turístico, el esfuerzo para la preservación del patrimonio cultural e histórico. Aprovechó para recalcar que la entrega de la Pomme d’Or es un reconocimiento al esfuerzo realizado para la consolidación del sector turístico que constituye el factor más importante para la promoción de la paz, la tolerancia y la convivencia entre los pueblos.

El gobernador de Diyarbakir agradeció al Presidente de Fijet  la entrega de este prestigioso premio, afirmando que el apoyo de Fijet permitirá a la ciudad desarrollar aún más su turismo y animar a los turistas a que acudan a descubrir su riqueza natural e histórica.

Viajar a Diyarbakir no es sólo visitar una interesante ciudad de Turquía, es como consultar la colección viva de silenciosas pero elocuentes huellas de la milenaria historia de una zona de Oriente Medio que ha sido cuna y testigo de contrapuestas civilizaciones. No es un viaje más, es una experiencia, ¡vívela!

 

FELIPE VI, SERBELLONI Y BELLAGIO, UN CURIOSO TRIÁNGULO

Cuando el rey Felipe VI incluyó a los Tercios en el desfile del 12 de octubre nos hizo recordar la grandeza del imperio español y su profunda implicación europea.

 

Fotos Paloma Ausejo

El Milanesado, casi un tercio del norte de la península Italiana, estuvo en poder de la corona española de 1.540 hasta 1.706 y en su momento fue estimado pieza clave del imperio español, por encima de las posesiones americanas. Los tercios españoles considerados en su época como prácticamente invencibles, tuvieron como misión mantener el corazón de Europa dentro de la corona española. Para ello tenían que acceder a Flandes desde la Península Ibérica y al no poder atravesar Francia, el camino estratégico pasaba desde Milán al norte europeo por los pasos de los Alpes. En alguna de sus modalidades el llamado “Camino Español” pasaba por las inmediaciones del lago Como, muy cercano a los cantones suizos por los que las tropas españolas tenían paso libre. Estas vías de acceso de alto nivel estratégico militar cruzan por lo que son ahora una de las regiones estratégicas para el de Turismo de alto nivel en Italia. El lago de Como en sus dos componentes que comenzando en las ciudades de Lecco y Como se unen hacia el norte formando una Y griega invertida, termina en la falda de las impresionantes y bellísimas montañas que separan, o unen según se mire, a Italia y Suiza. En la punta de la península formada por ambos ramales del lago está Bellagio, pequeña por su población estable pero grande por su capacidad para asumir un turismo en búsqueda de tranquilidad, arte y naturaleza en su estado más genuino. Desconozco la etimología del nombre pero sospecho que lo de Bella indica ya un modo de yacer al borde del lago cual si fuera una belleza salida de las aguas para ser admirada y por qué no, amada. Casi en la punta extrema de la península donde comienzan a unirse las aguas de los dos ramales se encuentra el hotel de la máxima categoría que lleva un nombre casi mítico en la Italia milanesa, el Gran Hotel Villa Serbelloni. Desde su piscina situada al borde de la aguas del lago las montañas alpinas aparecen a la luz de la tarde en todo su dorado esplendor. Por aquellos caminos por los que pasaron las legiones romanas y siglos después las tropas de los Tercios españoles, hoy se pueden hacer excursiones a caballo, en bicicleta o pertrechados con las botas de montaña en una pacífica caminata.

“Grande Gabrio” como se llamó a Gabriele Serbelloni, desenvolvió su febril actividad entre 1509 y 1580 y terminó su vida de aventuras militares y según algunos de comercio de armas, al servicio del rey Felipe II. En su profesión de condotiero había estado al frente de las tropas del Papa Pio IV, famoso por su apertura del concilio de Trento que comenzó la Reforma Católica. A la muerte del Papa, Gabrio pasó al servicio del rey de España. El soldado de fortuna hizo buen acopio de ella y no solo conquistó Maastrich para Felipe II al frente de los Tercios sino que previamente participó en la batalla de Lepanto, segunda barrera después de Poitier puesta por en Europa a las espadas mahometanas. Un antecesor y homónimo de Felipe VI, el Rey de El Escorial, nombró a Serbelloni virrey de Túnez quien una vez vuelto a Milán organizó la ayuda a la ciudad golpeada por la peste y de la que el gobernador había huido por miedo al contagio, demostrando así que no era únicamente un hombre de guerra.

Por aquella época ya comenzaban los nobles y grandes fortunas de Milán, Turín, Pavía y hasta Génova a construir impresionantes villas al borde del lago para descansar de sus ajetreadas aventuras y negocios. La gran mayoría se conservan hasta hoy como fantásticos ejemplos de la arquitectura italiana renacentista cargados, y a veces sobrecargados, de lujo y bellezas decorativas.

Las montañas que rodean al lago, alguna de ellas de 1600 metros de altura, no solo han contemplado el paso de los tercios españoles. Ya mucho antes por sus laderas cortadas casi a pico y por sus pasos angostos, vieron pasar a las legiones de Julio Cesar –(“ Gallia est omnis divisa in partes tres….”)- en su camino hacia la conquista de la Gallia.

Notables capítulos de la historia de Europa se evocan en el ambiente pacífico y tranquilo que invita al descanso, la contemplación y la reflexión. Esa sensación casi física la han debido sentir y difundir ilustres huéspedes del Serbelloni tales como los soberanos de varios países, incluida España o mandatarios democráticos como Franklin D Roosvelt o Winston Churchill y personalidades del mundo de la literatura, la música o las artes escénicas y cinematográficas. En su restaurante “El Mistral” galardonado con una estrella Michelin, el comensal se sentirá encantado de disfrutar de una excelente velada gastronómica y si es americano probablemente disfrutará de la proximidad de George Clooney, poseedor de una villa cercana al lago y frecuente cliente del restaurante.

Para los amantes del deporte de la vela las dos ramas del Como ofrecen la posibilidad de una sosegada navegación y zonas de fondeo próximas a los grupos urbanos con motivos diversos de atracción turística y gastronómica. Un poco más de esfuerzo requerirá el paseo en kayak y para los que no están especialmente motivados por los deportes sobre el agua una estupenda red de comunicaciones de motoras de diverso tamaño y frecuencia les pondrán en poco tiempo al alcance de las ciudades de Como y Lecco y de los bellos y amables núcleos urbanos que se asoman a las orillas del lago.

Ya sean huéspedes del Serbelloni, del familiar Belvedere con su excelente restaurante “La Varanda” o de otros establecimientos hoteleros y de pequeñas casas que ofrecen el sencillo pero acogedor “bread and breackfast” el visitante de Bellagio nunca se sentirá miembro anónimo de un turismo de masas.